Vacunazo
Hace unas pocas semanas, un tipo que prefirió mantener el anonimato, me preguntó por qué tenía tres marcas de vacunas e mi brazo y no dos como es lo normal. Él debe haber sido el número 84 de personas que me han preguntado lo mismo.
A decir verdad, nunca había tomado conciencia lo que significan esas tres cicatrices circulares en mi brazo. Para mi es parte de mi piel, no significan nada en verdad y de hecho, hasta hace muy poco juraba que a todos nos habían vacunado tres veces cuando niños. Hasta que le pregunte a mi mamá.
Yo solo fui la consecuencia de su mala suerte. Para quienes no la conocen, mi mamá tiene muy mala suerte, cosa que compra le sale mala y si alguien le compra algo que es para ella lo mismo. Siempre le tocan los platos más chicos, las sobras, le sale un perno en la carne, la empanada con más grasa, le cagan el cheque en la caja del supermecado, le cobran de más, se cae o le arreglan mal una muela, por nombrar solo algunas de las tantas "tallas" que le ha pasado en su vida.
Volviendo a mi, la cosa es que cuando era bebé...a la enfermera se le olvidó que ya me habían vacunado y volvió a pincharme, puede que suene ridículo pero en verdad fue así, sucedio, lamentablemente tuve que llorar dos veces. Y he crecido con tres en vez de dos hoyos.
A decir verdad, nunca había tomado conciencia lo que significan esas tres cicatrices circulares en mi brazo. Para mi es parte de mi piel, no significan nada en verdad y de hecho, hasta hace muy poco juraba que a todos nos habían vacunado tres veces cuando niños. Hasta que le pregunte a mi mamá.
Yo solo fui la consecuencia de su mala suerte. Para quienes no la conocen, mi mamá tiene muy mala suerte, cosa que compra le sale mala y si alguien le compra algo que es para ella lo mismo. Siempre le tocan los platos más chicos, las sobras, le sale un perno en la carne, la empanada con más grasa, le cagan el cheque en la caja del supermecado, le cobran de más, se cae o le arreglan mal una muela, por nombrar solo algunas de las tantas "tallas" que le ha pasado en su vida.
Volviendo a mi, la cosa es que cuando era bebé...a la enfermera se le olvidó que ya me habían vacunado y volvió a pincharme, puede que suene ridículo pero en verdad fue así, sucedio, lamentablemente tuve que llorar dos veces. Y he crecido con tres en vez de dos hoyos.